Flores de árnica, aceite de oliva virgen extra y vitamina E.
Nuestro aceite vegetal de árnica es tonificante y antiinflamatorio.
Oleomacerado elaborado de forma tradicional, con más de 40 días de maceración a la luz del sol y la luna, aportando así todas las propiedades antiinflamatorias y analgésicas de las flores de la árnica.
Presentado en envase de vidrio, con un aroma herbáceo y sutil, este aceite vegetal está indicado para dolores musculares, contusiones e inflamaciones.
¿Por qué es efectivo nuestro aceite?
Fitoterapia y tradición.
El árnica o Árnica Montana es una planta con una gran reputación y muy utilizada en la medicina rural, que ha mantenido su fama como eficaz antiinflamatorio natural en los remedios de herbolario y también como ingrediente farmacéutico.
Bella y prodigiosa planta, con un aroma que recuerda gratamente a la eterna manzanilla, rica en flavonoides y fitoesteroles, de grandes actividades farmacológicas antioxidantes y antiinflamatorias.
¿Cómo y cuándo utilizarlo?
Puedes aplicar nuestro aceite de árnica todas las veces que consideres necesario, ejerciendo una leve presión acompañada de un masaje en la zona a tratar.
Aconsejamos aplicarlo después de la ducha, con la piel limpia y seca.
Si prefieres que su absorción sea más rápida, aplica el aceite cuando estés dentro de la ducha con la piel mojada y acaba dando un ligero enjuague final sólo con agua.
Para los dolores musculares, te aconsejamos que también eches un vistazo a nuestro Bálsamo de tigre, la combinación de ambos te sorprenderá.
INCI- Olea Europea Fruits Oil, Arnica montana, Tocopheryl Acetate.
Uso tópico.
150 ml